DESCOSIENDO EL CINE POR LAIA POY SOLER

¿Os habéis preguntado alguna vez de donde sale toda la ropa que llevan los actores en las películas? ¿Se compra, se alquila o se confecciona?

La respuesta igual os sorprende.

¡Todo eso a la vez!

Los encargados de darles vida a los personajes en las películas somos el departamento de vestuario: nos dedicamos a comprar, alquilar, confeccionar, arreglar y romper la ropa.

Espera, espera, pero Laia, has dicho romper ¿eso puede ser?

Pues la verdad es que si, y es que dentro del departamento hay muchas posiciones diferentes, y entre ellas está la mía, Costume Breakdown Artist.

Exactamente, me contratan para hacer todo lo que nuestras madres y abuelas nos decían que no hiciéramos con la ropa.

Esta sección del departamento es una de las más creativas y divertidas, se basa en darle “vida” a la ropa. Pongamos un ejemplo:

tenemos una película donde nuestra protagonista pasa por una épica explosión para salvar al chico (sí, porque ya tocaba) y luego la vemos caminando gloriosa por la calle con él a cuestas.

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Las películas por regla general no se ruedan cronológicamente, sino que las secuencias se ruedan según las necesidades de producción, logística de localizaciones o incluso horarios de actores principales.

Entonces puede que rodemos primero las secuencias después de la explosión, a continuación la detonación y por último el momento previo a esta.

Lo primero que vamos a hacer es comprar el vestuario doble o triple según los requerimientos de dirección, puede que quieran rodar la secuencia varias veces y se necesite romper varios vestuarios.

Aquí es donde entramos las costume break down artists.

Como necesitamos rodar primero la secuencia que va después de la explosión vamos a tener que “ambientar” esa ropa como si la ropa hubiera sufrido la deflagración.

Y me diréis: ¿pero Laia como hacéis todo esto?

Pues antes que nada toca informarse buscando por ejemplo fotografías. Una vez tengamos una idea de cómo hacerlo, nos pondremos con las pruebas (somos buenas, ¡pero no todo nos sale a la primera!).

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Hacemos varias pruebas y tenemos reuniones con la o el figurinista. Esta figura es la cabeza de equipo, el responsable último de cómo queda todo el look de la película. Resumiendo, nuestro superior.

Este papel, junto al director o directora, deciden si quieren más o menos ambientación según la secuencia en la que estemos. Vale, ahora ya hemos hecho las reuniones pertinentes con nuestro jefe de departamento y el director, así que empezamos el trabajo manual.

Para empezar a ambientar siempre hay que tener en cuenta el tejido con el que se trabaja. No es igual envejecer prendas sintéticas que envejecer tejidos naturales, estos últimos siempre suelen ser mucho más agradecidos que los sintéticos.

Durante todo el proceso de ambientación iremos chequeando con nuestra figurinista si estamos por el buen camino, pues hay muchos procedimientos que no tienen vuelta atrás y si la prenda es única y nos equivocamos pues… ¡Adiós prenda! (tranquilos, nunca llegamos a ese punto).

Una vez tenemos la ropa ambientada y esta recibe las aprobaciones del equipo técnico, llega el día de rodaje. A todo esto, un secreto: las cosas no se ven igual al natural que por cámara así que puede pasar que… ¡Sorpresa! La prenda no se ve como queríamos.

Muchas veces la cámara y los focos se “comen” la ambientación, es decir, que hay mucha o poca luz o el movimiento del actor hace que nuestro trabajo no se vea como queremos, por esa razón es muy importante que la costume breakdown artist esté presente en el momento de rodar para poder retocar la ambientación de la ropa del actor en ese momento y pulir todo aquello que no nos acaba de gustar o no vemos del todo bien por cámara.

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La cámara es la que suele mandar por encima de todos, se podría decir que ese objeto inanimado también es mi jefe. Así que cuando veas ropa sucia, desgastada, con sangre, usada, quemada por un dragón o desagarrada por un zombie, piensa que detrás hay un equipo de gente haciendo posible esas manchas y que llevan muchas, pero que muchas horas de trabajo. 

El cine es glamour, pero también tiene su lado sucio.

Laia Poy
Costume Breakdow Artist
Graduada en Cinematografía
Especializada en Dirección Artística

@dnamilagros