Marcela es una referente en el mundo de la jabonería internacional. Lleva décadas dedicada a la enseñanza de la elaboración artesanal de jabones, cosmética natural y diseño de jabones. Autora del libro Belleza y Cosmética Natural. FB Jabones Artesanales del Mundo
— ¡Buenos días Chela! Se que te gusta que te llamen así, ¿a qué se debe?
— ¡Hola, Martha, un placer estar en BS! Aún no me acostumbro a que me llamen Chela, porque solo mi nona me llamaba así, sin embargo, no me disgusta, es un diminutivo cariñoso. Se debe a que, durante 2007 al llegar a España, trabajé pintando cuadros decorativos para una empresa de Barcelona y necesité un seudónimo. De inmediato decidí firmar mis obras como “Chela” y luego subí fotos de esos trabajos a la web como “Art by Chela”.
Cuando monté mi escuela online decidí seguir con ese nombre porque mi idea era seguir en el arte decorativo, pero todo dio un giro durante la crisis del 2008 y la jabonería pasó a ser de una afición a mi profesión. Ya no pude cambiar el nombre y así quedó, porque así me conocieron.
— Nacida en Argentina, pero sé que la vida y tu pasión te han hecho recorrer el mundo. ¿A qué se debe todo este movimiento?
— Sencillamente tengo un alma inquieta y creativa como toda cabra y la necesidad de explorar nuevos escenarios que prometen prosperidad y que pueden mejorar significativamente la calidad de vida de mi familia. Creo que los genes nómadas que llevaron a la humanidad a sobrevivir tantas veces están en algún lugar dentro de mi memoria y cuando veo situaciones muy desfavorables para seguir teniendo un aceptable “i-sho-ku-ju” (techo-vestimenta y comida) emigro a praderas más verdes y prometedoras. Siempre emigré por necesidad, no por placer, aunque hubiese preferido lo segundo, porque la búsqueda de una vida con abundancia es lo que nos mueve. Hablo de abundancia en todas sus aceptaciones.
— ¿Cuándo hiciste tus primeros jabones?
— Comencé en 1999, en Buenos Aires y mi profesora fue Mirta Biscardi, en su taller de Caballito. Descubrimos la jabonería artesana y natural, juntas, pero ella dio el primer paso, yo estaba más en la pintura decorativa. Desde que descubrí el jabón, jamás dejé de elaborarlo, es una actividad con muchas ventajas y gratificaciones.
— Vives en Barcelona donde tienes la exitosa escuela “Art By Chela Sé que han pasado más de 6.500 alumnos ¿Por qué crees que tiene tanto éxito? ¿Qué cursos son los más demandados? ¿Tus cursos son presenciales o también on line?
— Gracias por lo del éxito, uno nunca se cree donde está hasta que se lo cuentan, al menos así me pasa. Nos sorprendimos bastante cuando decidimos poner un contador en la web y comenzamos a sacar cuentas de los alumnos que habían estudiado con nosotros, fue revelador. Ya superamos los 7500. Supongo que toda esa acogida se debió a que “Art by Chela” fue la primera escuela online de jabonería artesana en España.
Empecé a vender cursos a distancia en 2008 por mi blog, desde entonces comenzaron a conocerme como maestra jabonera. En 2012 monté la escuela online en plataforma profesional y en 2014 comenzaron a invitarme a dictar clases en diferentes países, desde México a Japón. Desde entonces fueron apareciendo muchas otras escuelas más. Hemos visto un crecimiento exponencial del mundo de la jabonería artesana y he descubierto muchas veces que nuestra escuela fue una influencia importante y es inspiración para muchas mujeres emprendedoras.
Los cursos más demandados son los de fabricación de jabones por saponificación en frío y los de cosmética natural. Doy clases online y presencial, pero desde la pandemia he dejado las clases presenciales hasta que podamos tener una seguridad aceptable para reunirnos en grandes grupos.
— Tus jabones son más obras de arte que jabones propiamente dicho ¿Cómo surgen estos diseños?
— Creo que eso formó parte del “éxito”, el dejar de hacer pastillas de jabones tradicionales y buscar en ellos algo de arte. El jabón nunca dejará de ser jabón, pero ya lleva 2000 años siendo cuadrado, ¿Qué tal darle una forma diferente?
Comencé haciendo jabones artísticos influenciada por jaboneros de países más avanzados en este arte, como USA, UK, Rusia y Japón. Me encanta hacer jabones con forma de cupcakes, pastelitos, frutas, dulces, piedras preciosas, gemas inspirada en la naturaleza… la lista sería interminable, porque el jabón es una sustancia muy maleable, tiene texturas que van del líquido al sólido pasando por crema, gel y pasta, se puede colorear y perfumar fácilmente, se puede moldear, modelar y tallar, no se caduca, es un material con infinitas posibilidades.
— Aparte de tu libro Belleza y Cosmética Natural, que ya vas por la tercera edición, ¡enhorabuena! ¿Colaboras con otras revistas, ¿no?
— Sí, Belleza y Cosmética Natural fue como el hijito inesperado y consentido, se hizo con mucho esfuerzo y cariño como solicitud para la Editorial RBA. También publiqué libros y revistas de pintura y jabonería, escribí artículos para Plantea, La Vanguardia y muchas revistas en varios formatos. Desde hace dos años escribo artículos de cosmética vegana para la Revista Cuerpo Mente de Editorial RBA.
— ¿Por qué crees que la gente se vuelca tanto a los productos naturales?
— Por un cambio de conciencia obligatorio que debemos plantearnos. El cambio climático, la emisión CO₂ y la contaminación ambiental y la explotación abusiva y desenfrenada de los recursos naturales nos hace reflexionar en el “cómo puedo cambiar cosas desde donde estoy”. La respuesta está en comenzar a consumir menos y más sano, responsablemente, reducir los residuos al máximo y comprar de forma inteligente. Hacer tu propia cosmética es un inicio muy importante. La cosmética natural te ayuda a ahorrar dinero, baja residuos, emite menos huella de carbono, consumes lo que necesitas, es natural, es ecológica y biodegradable, eliges lo que usas, puede ser BIO y bajas considerablemente la cantidad de productos que tienes en tu tocador. Demasiadas cosas buenas haces cuando elaboras tu cosmética. Igual te quita tiempo, pero te puedes organizar y enseñar a tus hijos a elaborarse sus propios productos de aseo corporal y para el hogar.
— Sé que has pasado muchas trabas en tu camino de emprendimiento ¿Cómo los has superado?
— En este último y en todos los anteriores… Todo emprendimiento implica riesgos, trabas y altibajos. Sortear los problemas pasa más por cómo te enfrentes a ellos, tu actitud y confiar en toda la aptitud que puedas acaparar de tu alrededor. Si amas lo que haces y crees en tu proyecto podrás salir vencedor de los obstáculos. Claro que una actitud positiva, inteligente y persistente tendrá más chances que los que ven siempre el vaso medio vacío. Cuando nos encontramos con un problema lo que hacemos es evaluarlo, no desesperar, y encontrar la forma de convertirlo en una OPORTUNIDAD. Si es una dificultad para crecer, invertimos o tercerizamos, si es un estorbo o un freno lo eliminamos, pero no dejamos de avanzar. Es fundamental saber delegar a tiempo y contar con el apoyo de expertos que te asesoren y ayuden a crecer y, además, super importante escuchar a los que saben para quedarte con la mejor opción.
— ¿Cómo lleva tu familia que trabajas tanto y que estás tan expuesta en las redes?
— Bueno, mi familia lo lleva bien porque somos todos de redes sociales. Mi esposo es el único que no le gusta exponerse, aunque le encanta seguirlas. Aunque estoy en muchas redes, soy boomer a toda honra y me cuesta manejarlas, tengo varias personas que me asisten. No soy de exponer mi vida privada en las redes, posteo muy pocas fotos mías, subo mucho contenido referente a mi profesión. No sirvo para salir constantemente mostrando lo que estoy haciendo, no me siento cómoda, sé que así llegas a muchísimas más personas y me gustaría poder ser más desinhibida, pero me cuesta enormidades ponerme a hablar ante una cámara, cosa que no me sucede en público.
— ¿Mar o montaña? Música
— Montaña, montaña y mar para el veranito. Las montañas me recargan, tienen muy buen chi, por eso vivo al pie del Montserrat.
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