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Fotografía de Patricia Romagnoli |
Hoy más que nunca, necesitamos RESIGNIFICAR el valor de la piel en toda su extensión, y principalmente en las zonas que tendremos expuestas toda nuestra vida.
La piel siempre ha sido el soporte del maquillaje, pero no siempre se ha tenido en cuenta como el órgano que es, el más grande, el más delicado y fuerte a la vez, el que nos delata y se comunica con lenguaje propio por ej., rosácea, vitíligo, acné etc., son todas patologías que tienen base en lo emocional además de lo biológico, y eso hace que quedemos expuestos en más de una oportunidad.
Cuando décadas atrás hablábamos de maquillaje, se interpretaba que significaba tapar la piel, cubrir imperfecciones, corregir todo etc., la realidad que hoy por hoy, muchos maquilladores tenemos la visión que la piel tiene el máximo valor como parte del maquillaje, por lo tanto ya no creemos que cubrirlo, taparlo y corregir TODO sea la consigna, creemos que hay que cuidarlo toda la vida en el día a día, y si estamos en proceso de un evento puntual por ej. una boda o la noche de nuestros sueños, la piel tiene que brillar con luz propia, nosotros acercarnos como profesionales cada vez más a revalorizar y redimensionar la belleza humana natural, dejando que los rasgos nos identifiquen y no marcando con patrón ajeno un rostro que no nos pertenece. Para todo esto, los productos son nuestros aliados, créanme que el producto en el que siempre tenemos que invertir es el producto BASE de maquillaje, y este concepto ha cambiado, antes como veíamos las bases eran cobertores, bloqueadores de la piel etc.
Hoy la base es la preparación de la piel para el mejor apoyo de las acciones que llevaremos a cabo, por ej. un PRIMER es un producto de base, si bien se creó en función de la tecnología HD para que la piel no se tomara todo el producto, más fino y con menos cantidad de polvo, se fueron desarrollando como perfeccionadores con alternativas de textura y color para poder solo con ese producto o tapizando con algún otro, lograr una piel sublime.
Tener una base de maquillaje es fundamental para que se fijen los demás productos que se instalarán en la piel a posteriori.
Otro concepto que transmito mucho es el ejercicio de pensar que nuestro ojo, en la medida que no hay producto, reconoce la imagen real de nosotros, al colocar algo en superficie lo detecta como algo raro y se extraña.
No siempre los maquilladores tenemos aliados en nuestros clientes respecto a la base, creo es el gran desafío para nosotros, que nuestros clientes piensen que si bien ellos quieren verse hermosos, el ojo ajeno que no sabe las decisiones que tomamos a la hora de intervenir la piel, observa pequeños aciertos y esa belleza singular, nos empodera.
¡Es muy importante confiar en una persona que nos asesore para de esa forma, ir con seguridad a la acción!!
¡MAQUILLARSE ES PONER EL FOCO EN UNO MISMO,
IRRADIANDO HACIA LOS DEMÁS!!
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Patricia Romagnoli Maquilladora - Escritora Uruguay |
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